El espesor de los recubrimientos de carburo de tungsteno suele estar entre 50 micras (0,05 mm) y 500 micras (0,5 mm), según el escenario de aplicación, el entorno de trabajo y los requisitos de uso del rodillo. La elección del espesor del recubrimiento debe equilibrar la resistencia al desgaste, la resistencia al impacto y otras características de trabajo del rodillo.